El vestuario de los jugadores de golf cuenta con unas particularidades muy especiales. Su origen británico aporta un estilo formal que, con el paso del tiempo y las diferentes tendencias, se ha ido modificando poco a poco.
La mayoría, cuando pensamos en un golfista profesional y tradicional, imaginamos al deportista con un polo, con cuello, metido por dentro de los pantalones. Estos pueden ser largos, bermudas o bien, pantalones cortos con calcetines. También lo imaginamos con unos zapatos reglamentarios adaptados para este deporte y, por supuesto, la característica gorra o boina que les protege del sol.
La gorra como instrumento de patrocinio comercial en el golf
La gorra de golf, que ahora es un elemento totalmente característico de este deporte, no se usaba desde sus inicios. Los jugadores, antes de su aparición, si utilizaban otro tipo de prendas como sombreros o boinas que, aunque tienen la misma función, protegen del sol, no es la “gorra de golf” que conocemos hoy en día.
La historia de la gorra del golf comienza en la década de los 50. Los jugadores profesionales hacen de este accesorio parte de su uniforme revolucionando el código de vestimenta de este deporte. La razón de esto se debe a un fenómeno comercial que en la actualidad está muy extendido en este y en otros deportes: el patrocinio.
Las marcas pagaban a los jugadores por utilizar sus gorras en los partidos. Es decir, las gorras en el golf, se habían convertido en un instrumento de promoción. A partir de ese momento, se abrió una nueva puerta comercial en la práctica de este deporte. Los patrocinios con jugadores de golf profesionales de marcas que no eran de ropa exclusivamente para uso de golfistas.
Algunas de las primeras marcas en realizar estos acuerdos comerciales fueron KPMG, Mercedes, Netjets, Audemars Piguet. Y el resto, es a lo que estamos habituados hoy en día. Las vestimentas de los deportistas e incluso ellos mismos, con su imagen, se han convertido en grandes embajadores para todo tipo de marcas.
Ventajas del uso de la gorra de golf
En la actualidad, el uso de la gorra no es obligatorio, por lo general, pero si entra dentro del código de vestimenta de muchos clubs. Además, es un accesorio muy útil por sus numerosas ventajas:
- Protegen a los jugadores de la radiación del sol.
- En invierno son buenas aliadas para aguantar el frío y la lluvia.
- Nos facilita ver la trayectoria de la bola al protegernos de la luminosidad del sol que tanto puede llegar a molestarnos y cegarnos.
- Es un accesorio que por su estética nos ayuda a crear nuestra marca personal. Algo que siempre ha tenido mucha importancia en el mundo del golf.
Seguro que a partir de ahora prestarás más atención al estilismo y accesorios que llevan los golfistas profesionales. ¿Ya sabes que look te vas a poner para la próxima vez que juegues al golf? Tenemos muchas ganas de verte en algún viaje de Golf con nosotros.
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